GESTIÓN DE RESIDUOS
En España aún tenemos un 54% de vertido, con el riesgo ambiental asociado, distanciándonos de los países europeos del norte, donde los niveles de vertido son inferiores al 3%.
Cambio Climático
Según el informe de G-Advisory, firma de asesoramiento independiente del Grupo Garrigues, la huella de carbono de la valorización energética es claramente menor que la asociada a la eliminación en vertedero. Se demuestra que los vertederos emiten 772 kg CO2 e por tonelada tratada, mientras que la valorización genera unas emisiones de 224 kg CO2 e por tonelada tratada. Es decir, los vertederos emiten un 245% más de emisiones GEI que la valorización energética.
Menor espacio
Las plantas de valorización energética ocupan mucho menos suelo que un vertedero.
Sin lixiviados
La valorización no genera lixiviados.
Menor volumen
La valorización reduce el volumen de los residuos en un 96%- 98%.
Normas más estrictas
El control ambiental de una planta de valorización es mucho más estricto y más fiable que el de un vertedero, de hecho, las normativas son las más estrictas en emisiones industriales.
Mayor cercanía
Posibilidad de ubicación próxima a las ciudades con el correspondiente ahorro en transporte y eficiencia en el uso de su energía.
Sin olores
Las plantas no expulsan mal olor.